- AZOTADO POR EL VIENTO

Hola a tod@s!

Lo de hoy es un tanto complicado... complicado de hacer, o de que parezca real...y si sale bien...pues a disfrutar del efecto óptico.

El bonsái de hoy es una sabina rastrera. Las sabinas rastreras son enebros, y son un clásico entre los bonsáis...raro es el aficionado al bonsái que no tiene un ejemplar de estos en sus filas.
A día de hoy estas especies se encuentran sobre todo en la sierra de Javalambre (Teruel) y está bastante penado administrativamente el recuperarlas de su hábitat para trabajarlas como bonsái , ya que mucha gente se dedica a arrancar 100 de ellas para que luego sobrevivan raramente 10 y asi poder venderlas posteriormente...

En mi ya comentado viaje a Peñiscola ,en anteriores post, además del ullastre mallorquín, adquirí tambien una sabina rastrera, la cual llegó asi a mi casa:

Y he esperado a la llegada del frio para trabajarla...aunque lo unico que he podido hacer es alambrarla (que no es poco) , ya que no estamos en época de trasplante.
La verdad que no tenía ni idea de que forma darla, asi que empecé a improvisar cogiendo el alambre y poniendome manos a la obra...

Lo primero que hice fue ponerla delante de mi y darle una y mil vueltas para ver que frente iba a coger para el árbol, es decir la cara del bonsái:

...y una vez "mas o menos" decidido , me arriesgué a hacer el mas difícil de los estilos de bonsáis ,en japonés FUKINAGASHI (AZOTADO POR EL VIENTO) , es un estilo que como habéis podido apreciar en la primera foto, con la gran colaboración de mi hijo Diego, es como si el árbol estuviera azotado por el viento...y es un efecto óptico bastante complicado de alcanzar , al menos para mi...
...y dicho esto comencé a alambrar:

Y después de cuatro horas y media alambrando y pinzando los brotes...ya ni veía lo que estaba haciendo , ni si quedaba bien o mal... así que pedí el consejo de mi mujer y mi hijo , siendo este el resultado: